José Ardillo, Ediciones El Salmón
Argelaga
Recomendamos encarecidamente la lectura de este libro, una recopilación de ensayos atravesados por la idea de la construcción de una sociedad libre en un mundo con recursos limitados y atrozmente desequilibrado. Fueron publicados en revistas alternativas como Raíces, Ekintza, Al Margen o la misma Argelaga. El autor es hijo de los años ochenta del siglo pasado, época donde las esperanzas de emancipación habían sido borradas por la derrota de la esperanza de un cambio real, por la subsiguiente renuncia, desencanto y resignación. Es la época del desgarro punk, del no hay futuro y del vive intensamente dejando al final un bonito cadáver. Pero a pesar del sentimiento generacional de frustración que domina entre tanta reconversión, parlamentarismo profesional y cultura de masas, el autor recoge los fragmentos rompedores de la década anterior, encontrándose con autores marcianos como García Calvo, Murray Bookchin, Paul Goodman, Theodore Roszak, Herbert Marcuse… cuya obra le sirve para orientar la suya propia. Ardillo encuentra en la contracultura americana y europea, en pensadores libertarios como Kropotkin, Reclus, Landauer, Godwin o Thoreau, y en francotiradores o heterodoxos de la sociología como Ivan Illich, Morris, Huxley, Mumford y Ellul, elementos suficientes para desarrollar una crítica que no dudamos en calificar de coherente y fructífera. Los planes emancipatorios que en la plenitud consumista eran tachados de ilusorios y utópicos, ahora vuelven a la palestra tras la crisis general que se adueña de la sociedad desarrollista y aparece violentamente en diversos terrenos: el demográfico, el industrial, el energético, el financiero, el político…
Nos inclinamos a pensar, más o menos como el autor, que en un planeta con restricciones físicas importantes, la geografía, la botánica o la ecología son tan importantes como la historia y la antropología en la elaboración de proyectos de libertad y comunidad sólidos y racionales. El autor acaba de autoeditarse su tercera novela, titulada Buenos días, Sísifo, de la que nos dice es una «historia entre irónica y melancólica sobre el retorno a la tierra.»